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Ansiedad por la comida

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Fecha de publicación: 30-11-2023

¿Puede tener mi hijo ansiedad por la comida?

Casi todos los casos de obesidad infantil se deben a una alimentación y estilo de vida no saludables (inactividad física, sedentarismo, mucho uso de pantallas y gran consumo de alimentos procesados).

Tomar mucha comida sin hambre y por malestar psicológico (aburrimiento, angustia, dificultad para resolver problemas…) es lo que se llama hiperfagia por estrés y es una de las causas que mantienen la obesidad en el niño, que cada vez es más frecuente.

La hiperfagia puede ser de dos tipos:

  • Pasiva: el niño no se da cuenta de que toma más comida.
  • Activa: el niño de manera consciente toma más comida (hambre emocional) para mejorar su malestar.

¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a frenar la ansiedad por la comida?

Para prevenir que coma mucho y de forma adictiva hay que implicar a toda la familia en la creación de nuevos hábitos.

Es importante hablar con tu hijo/a sobre lo que le preocupa y ver cómo se enfrenta a los problemas del día a día (si tiene estrés, inseguridad, ansiedad). Si conseguimos que mejore su respuesta, se puede evitar la actitud compulsiva con la comida. Les debemos ayudar con el autocontrol de sus emociones y de la comida.

Hay que trabajar con él o ella en:

Control de las emociones:

Se pueden hacer dos técnicas de autocontrol emocional:

  • Técnica del semáforo:

Se trata de enseñar a los/as niños/as a relajarse ante momentos de ansiedad.  Debe dibujar un semáforo, en el que pondrán estas instrucciones:

  • Primer paso (color rojo): DETENCIÓN. Le decimos al niño que debe estar quieto, como lo haría un coche con semáforo en rojo.
  • Segundo paso (color ámbar): REFLEXIÓN. Juntos describimos en voz alta lo que nos está pasando en nuestro «interior». Las sensaciones que tenemos en nuestro cuerpo y lo que nos pide ahora nuestro cuerpo y mente que hagamos. Acto seguido, pensar en otras opciones distintas que pueda hacer.
  • Tercer paso (color verde): OPCIONES. Dar distintas opciones para que el niño o la niña elija la que crea mejor y la haga.

  • Técnica de la tarta: se dibuja en un papel una tarta y se divide en porciones. Dentro de cada porción se escribirá un truco para que se calme. Ejemplos: respirar profundo, contar hasta 10, imaginar un paisaje o situación que le calme. El/la niño/a irá escogiendo la porción que crea que puede ayudarle más en ese momento.

Control del comportamiento

Es crucial ayudar al niño/a para tomar conciencia, conocer y comprender los hábitos alimentarios saludables que hace y los que queremos que cambie. Se aconseja hacer un registro visual y bonito en el que se pongan el número y tipo de comidas, la frecuencia y tipo de actividad física, las horas de uso de pantalla y de sueño. De esta forma, tendrá conciencia sobre sus rutinas. También podrá distinguir ciertas señales, como saber cuándo come porque tiene hambre de verdad o cuando es por otra causa. Además, para que tenga una conciencia correcta y sana, no puede faltar que aprenda no solo cuánto come, sino qué come.

También es bueno cambiar la forma de comprender y registrar los alimentos, sabiendo que hay que diferenciarlos en función de su valor nutricional, no en función de cuántas calorías tiene. Mostrarles cómo conocer la comida según sea más nutritiva (frutas y verduras) o menos (bollería industrial).

¿Cuándo debo consultar con mi pediatra?

Si cree que su hijo ha ganado mucho peso o que su relación con la comida no es correcta debe acudir a su pediatra para ver su estado nutricional y los posibles problemas causados por la obesidad.

Así mismo, la obesidad causada por hiperfagia por estrés puede ser síntoma o consecuencia de un problema psicológico y social, por lo que su pediatra valorará si requiere terapia psicológica. 

Fecha de publicación: 30-11-2023
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