Hay personas que cuando las evalúan (un examen, entrevista, prueba oral, etc.) sienten que no funcionan todo lo bien que esperaban. Y sus notas bajan. Cuando se repite esa situación, les pasa lo mismo. Es frecuente entre los estudiantes (3-5% según encuestas).
Ocurre porque vemos esas situaciones como amenazantes (si suspendo, repito; si no me cogen, no trabajo). El peligro puede ser imaginario o real.
Cuando tenemos estrés, la atención se desvía de la tarea, para hacer caso a los signos de ansiedad. Entonces, necesitamos más esfuerzo y más tiempo para hacer lo mismo que los demás.
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María Villa Arranz. Pediatra. Centro de Salud "La Rivota". Alcorcón (Madrid)
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Gema García Ron. Pediatra. Centro de Salud "La Rivota" Alcorcón (Madrid)